Les falta insulina...y buenos médicos

México, DF. Noviembre 13.- Ocho de cada diez enfermos de diabetes están “mal” o “muy mal” atendidos, admitió ayer la Secretaría de Salud.
Esta situación, según la dependencia, no sólo puede costarle la vida al paciente, sino aniquilar la salud de todos los mexicanos, ya que de no atajarse a tiempo, la atención por las complicaciones del padecimiento sería incosteable, y el presupuesto de las instituciones de salud quedaría hecho añicos.
De hecho, pasarán al menos 20 años para que en México este problema de salud pública pueda estabilizarse. Hoy es la primera causa de muerte en mujeres y la segunda en hombres: cada año cinco por ciento de los niños mexicanos se suman a las estadísticas de enfermos diabéticos.
Éste es el diagnóstico que da el secretario de Salud, José Ángel Córdova Villalobos, en el marco del Día Mundial de la Diabetes, que deja ver cuán gris se pone el panorama por la falta de una cultura de prevención y el retraso en la detección.
Según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2006, de los 0 a los 11 meses los bebés ya presentan sobrepeso; dos de cada tres defunciones en mujeres indígenas son a causa de la diabetes mellitus; 70 por ciento de los mexicanos tienen algún problema de obesidad o sobrepeso; y el tratamiento de las enfermedades crónicas, en especial de la diabetes, se comen entre 10 y 13 por ciento del gasto en salud.
En suma, se calcula que 10 millones de mexicanos son diabéticos, y al menos la mitad, ni siquiera lo sabe. De no actuar, en los próximos 20 años la cifra podría duplicarse.
“Esto quiere decir que estamos ya sentados en una bomba de tiempo que nos va a cobrar la factura tarde que temprano con más enfermedad, con mayores tasas de mortalidad sobre todo a edades más jóvenes.
“Tenemos el temor de que, si no logramos controlar esta epidemia, puede llegar un momento en el que los recursos ya no alcancen para poder atender sobre todo las complicaciones, esto no es algo que estemos descubriendo, es algo que incluso algunos países desarrollados ya lo están viviendo, sistemas de salud que han quebrado por no tener suficientes recursos o tendríamos que limitar la atención”, advirtió el titular de salud.
El encargado de la política de salud en el país, dijo que lo que sí se tiene proyectado es reducir la curva de crecimiento de la enfermedad en un 20 por ciento de aquí al 2012.
Una de las estrategias que ha reiterado en varias ocasiones la Secretaría de Salud para combatir la obesidad entre los niños es fomentar la lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses de vida, que está teniendo éxito en las comunidades rurales.
El obstáculo con el que se han topado es que las mamás agregan además de la leche, líquidos azucarados y bebidas energéticas que de nada les sirven a los niños quienes al final son los que terminan pagando la factura: tan sólo en los últimos 15 años la cifra de los niños con sobrepeso y obesidad se triplicó en algunos estados de la República, principalmente en los del centro, según la Ensanut 2006
“En algunos estados, hasta con incidencias de 33%, es decir, una tercera parte de los niños, de los adolescentes y de los adultos mayores de 20 años, 72% de las mujeres y 67% en los hombres”
“Esto, insisto, también desde el punto de calidad de vida preocupa muchísimo, pero nos preocupa también y de manera muy importante el costo de la atención porque en algunas de las instituciones, el costo de los pacientes hospitalizados puede representar un 34%, es decir, una tercera parte de lo que se gasta, son pacientes que tienen problemas de diabetes” recalcó Córdova Villalobos.
En esto contexto la Ssa puso en marcha un programa piloto denominado “La Salud, Tarea de Todos”, en 18 ciudades de 17 entidades federativas, que contribuirá a lograr la meta para reducir en 20 por ciento el ritmo de crecimiento de la diabetes para los próximos cuatro años.
Se trata de fomentar la actividad física, el consumo de agua natural y frutas y verduras.
Al inaugurar en la Ciudad de México las actividades que se realizan para conmemorar el Día Mundial de la Diabetes en Latinoamérica, Córdova Villalobos apuntó que se ha demostrado científicamente que por cada dólar invertido en etiquetado que muestre las cualidades nutrimentales de los productos, se ahorran 100 dólares en gastos de salud en un periodo de 20 años.
“Solamente el 20% (pacientes) o en algunos casos un poquito más pero que no pasa de 25%, tienen un tratamiento que pudiera considerarse como correcto, como adecuado, como un tratamiento que pude prevenir las complicaciones, entonces hay una gran área, un gran campo de trabajo en el que tenemos que empeñarnos e ir buscando la excelencia, primero, para el diagnóstico oportuno, segundo, para la cultura por la prevención y la salud, y tercero, para el tratamiento adecuado con el objetivo de disminuir las complicaciones”, expuso. (De Las Agencias)