México, DF. Febrero 26.- La alta permeabilidad e irregularidad de los cruces migratorios en la frontera sur de México representa riesgos para que delitos como la trata de personas se cometan en esa zona, señaló Rodolfo Casillas, investigador de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso).Según el académico, en la frontera sur existen más de 40 puntos de cruce indocumentado de vehículos; más de 350 puntos de cruce de personas y persiste el funcionamiento irregular de los cruces legales.
Los principales problemas de inseguridad que presenta la frontera sur, advirtió, son el narcotráfico; el tráfico y la trata de personas; el tráfico de armas; la expansión del cultivo de mariguana y el crecimiento de consumo de drogas, incluidas las sintéticas.
Durante el Segundo Seminario Internacional sobre Trata de Personas, Casillas explicó que en la frontera sur existe una permeabilidad positiva y una negativa.
Entre los aspectos positivos se encuentra la existencia de viejos vínculos sociales, culturales, económicos y familiares que generan un clima para la aceptación de los migrantes.
Sin embargo, de manera negativa se encuentra un doble criterio en la política migratoria de México, que da facilidades para el ingreso y la estadía de la migración internacional regional y restricciones crecientes para la transmigración indocumentada.
Así, mientras las devoluciones y los rechazos de indocumentados se han incrementado desde la década de los 90, al mismo tiempo han proliferado redes delictivas que han diversificado sus prácticas, han ampliado su influencia territorial en medio de un ambiente de corrupción e impunidad.
"A mayor vulnerabilidad del migrante, mayor afectación del tejido social, lo que implica un debilitamiento del orden institucional", aseguró.
Dijo que entre los riesgos que persisten en la frontera sur para alimentar la inseguridad, se encuentra la gran brecha entre la región sur-sureste y el resto del país, y entre esa misma región y las regiones de Centroamérica.
Otros riesgos son la existencia de redes de traficantes de migrantes, drogas, armas y de tratantes de personas en la región con alcance local, nacional, continental y extracontinental.
Por otra parte, el Gobernador de Tabasco, Andrés Granier, el presidente de la Comisión de Justicia de la Cámara de Diputados, César Camacho y el director general edel Centro de Estudios e Investigación en Desarrollo y Asistencia Social (CEIDAS), hicieron un llamado a todas las instituciones públicas y privadas del País para reconocer que la trata de personas es una de las mayores amenazas al cumplimiento de los derechos humanos en México.
Los firmantes de la "Declaración de Tabasco" exhortaron a las instituciones a comprometerse a colocar al centro de todas sus decisiones la defensa del interés superior de la niñez; y abogar por la erradicación de todas las formas de abuso o violencia contra niñas, niños y adolescentes.
Asimismo, pidieron generar acciones de prevención de la trata de personas, así como de otros fenómenos y crímenes que facilitan su comisión; construir programas específicos para la atención de víctimas de este crimen; la construcción de refugios y albergues especiales, así como mecanismos de rehabilitación y reinserción social.
En el marco del Seminario Internacional sobre Trata de Personas, realizado en Villahermosa, llamaron a implementar acciones para el establecimiento de sistemas oportunos de atención, información y prevención de la trata de personas.
El combate, rezagado
Los “enganchadores” ubican a las jovencitas más atractivas en centrales camioneras, estaciones del Metro o a través de internet. Saben aprovecharse de las condiciones de pobreza y exclusión en las que viven muchas de ellas, por lo que comienzan el engaño ofreciéndoles trabajo, una relación sentimental o nuevas oportunidades de vida. Sólo es cuestión de tiempo para que varias terminen siendo explotadas sexualmente.
Aunque a finales de 2007 entró en vigor la Ley para Prevenir y Sancionar la Trata de Personas, expertos advierten que faltan muchos puntos por cumplirse para combatir el problema. La ONU ha señalado incluso negligencia oficial.
La incapacidad institucional para tipificar el delito ha impedido, a niveles federal y local, que miembros de redes criminales sean procesados y condenados.
La Fiscalía Especial para los Delitos de Violencia contra las Mujeres y Trata de Personas (de la PGR) investiga sólo aquellos casos en los que esté implicado el crimen organizado; se traslade a las víctimas a otro país, o haya participación de servidores públicos.
El país carece de un diagnóstico integral sobre el alcance, víctimas y costos sociales de la trata de personas; sin embargo, testimonios recogidos por la Unidad de Investigación del periódico El Universal aportan indicios.
“Voy a México en busca de mi destino”
Se fue con su novio”. Es la respuesta que ha recibido en los últimos 40 días Ivette Suárez Reyna al acudir con las autoridades para denunciar que su hija Nut Carolina Toledo Suárez, de 14 años, desapareció el pasado 2 de enero y es posible que haya sido víctima de trata
de blancas.
“Mi hija canta precioso. Hace unos años hizo audición para un reality show para niños, yo misma la traje a la Ciudad de México. Quería ser cantante”, recuerda la madre al mismo tiempo que toma aire y esperara unos segundos antes de continuar. “Qué puedo decir de mi niña. Es una excelente estudiante, simpática. Es una buena niña y no sé dónde está”.
Carolina y sus dos hermanos vivían con su madre y su abuela en Tehuantepec, Oaxaca. El 24 de diciembre cumplió años, entre las felicitaciones de familiares de Tierra Blanca, Veracruz, surgió la invitación para que pasara el Año Nuevo con ellos.
“Ella me insistió que la dejara ir y accedí. Le preparé su sándwich, le puse jugos, refrescos, todo para que no se bajara del autobús; hasta se la recomendé al chofer”. Estuvo fuera de su casa por casi una semana, pero “le tenía prohibido entrar al internet y se me pasó advertirle eso a los familiares. En esos días estuvo metida mucho tiempo en sus páginas de metroflog. Subía fotos, recibía comentarios. Incluso, estuvo conectada horas antes de regresar a su casa”.
El 2 de enero salió de Tierra Blanca a las 10 de la noche en el autobús 4715. Casi tres horas más tarde, hubo una parada en Tuxtepec. La adolescente decidió abandonar ese transporte y comprar un boleto hacia la Ciudad de México.
La vendedora de la estación de autobuses —al ver la fotografía que Ivette le muestra— recordó a la adolescente, porque durante la compraventa le dijo: “Voy a México en busca de mi destino”, lo que le causó una leve sonrisa.
El 3 de enero, Ivette sintió culpa, impotencia, coraje, tristeza, todo a la misma vez porque Nut no descendió del autobús que la regresaría a casa. “El chofer me dijo que se bajó en Tuxtepec porque la niña le comentó que había una emergencia y se tenía que quedar ahí”.
El autobús en el que la adolescente viajó, incluso tuvo sobrecupo. Nut tuvo que sentarse en la escalinata y taparse con una frazada que el conductor le prestó. Llegó a la terminal TAPO de la Ciudad de México horas después. Ésa es la última pista de su paradero.
La madre sabía de los peligros que existen en internet para embaucar a jovencitas y siempre advirtió a Nut sobre el tema, pero ella le respondía que no había nada de qué preocuparse.
Ante la desesperación, contrató a un hacker, quien identificó las páginas de redes de amigos cibernéticos a las que pertenecía su hija. Logró revisar parte de las últimas conversaciones en el chat y ahí descubrió que tuvo dos invitaciones a fiestas, una en San Luis Potosí y otra en la Ciudad de México, esta última la hacía “un tal Chocolate”.
La alarma incrementó aún más. “Yo sé de la trata de personas vía internet y en mi búsqueda me he encontrado con muchas madres que perdieron a sus hijos de la misma manera. Esto no es casual, no es aislado”, dice.
En Oaxaca, el procurador Evencio Nicolás Martínez Ramírez canaliza a Ivette con funcionarios de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada y “ahí empieza mi calvario burocrático”. Le argumentan que el caso no puede ser considerado como secuestro.
“Si tiene 8 años te dicen que sí es un secuestro, pero como tiene 14 lo primero que te dicen es que se fue con el novio seguramente”.
De ahí la enviaron a la Fiscalía Especial para los delitos de Violencia contra las Mujeres y Trata de Personas, “me dicen que harán las investigaciones correspondiente y que me van a mantener al tanto”.
Pero Ivette decide investigar por su cuenta. Toda la travesía que su hija pasó lo fue descubriendo con las fotografías en mano y preguntando a los posibles testigos en las terminales, con los amigos y el novio de su hija. “Si estuviera con el novio sabría dónde buscarla, pero no está ahí”.
Ahora es urgente rastrear todas las conversaciones y a los amigos de la red dentro del metroflog, pero para eso sí necesitan a especialistas que la policía cibernética tiene, pero que no pone a trabajar en el caso.
Pese a que el procurador de Oaxaca envió oficios de colaboración a sus homólogos de todo el país, no han investigado en ningún lado. Incluso, en un programa de radio, Óscar Manuel Irarteaga, funcionario de la PGR, se comprometió a resolver el caso, pero hasta el momento no ha habido ningún avance. (De Las Agencias)
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